El Hospital Vithas Valencia 9 de Octubre incorpora un robot quirúrgico Da Vinci para realizar intervenciones complejas con la máxima precisión. Con esta nueva incorporación, el Grupo Vithas cuenta ya con cinco robots quirúrgicos ubicados en los hospitales Vithas Sevilla, Vithas Vigo, Vithas Xanit Internacional y en el Hospital Universitario Vithas Madrid Arturo Soria. Esta tecnología se ha convertido en una necesidad en los quirófanos españoles ya que ofrece una alternativa mínimamente invasiva, eficaz y de alta precisión que permite tratamientos individualizados, sobre todo, para el cáncer de próstata. Tal como explica el director gerente del Hospital Vithas Valencia 9 de Octubre, el doctor Jose Luis Rey, ”la incorporación de esta tecnología de vanguardia en nuestro centro supone una importante apuesta por un tratamiento quirúrgico de vanguardia y por garantizar la calidad asistencial multiplicando el éxito de la intervención y reduciendo los riesgos y complicaciones”. La primera intervención en el Hospital Vithas Valencia 9 de Octubre con esta nueva tecnología ha sido una prostatectomía radical para tratar un cáncer de próstata que ha sido realizada con éxito por el doctor Jose Rubio. Desde el 2018, el doctor Rubio realiza cirugías robóticas y es formador de otros profesionales. Además, cuenta con más de 200 cirugías robóticas en estos equipos, lo que le convierten en un experto de dilatada experiencia en este campo. Para el especialista, “el robot quirúrgico Da Vinci ha supuesto un gran avance en cirugías urológicas como la prostatectomía radical para el cáncer de próstata, la nefrectomía parcial o total para el cáncer de riñón o la cistectomía radical para tratar el cáncer de vejiga” y subraya que “la cirugía prostática es la cirugía robótica que con más frecuencia se realiza”. También añade que “la prostatectomía radical por carcinoma y la prostatectomía simple por adenoma benigno son dos indicaciones claras para el uso del robot Da Vinci” El robot permite al cirujano una visión completa en tres dimensiones de alta resolución, con un aumento de la imagen de 10 a 15 veces, lo que proporciona una mayor percepción de profundidad y un campo de visión más claro. Además, el sistema de brazos quirúrgicos, de apenas un centímetro de diámetro, permite al cirujano realizar movimientos complejos de alta precisión en espacios muy reducidos. Según el doctor Rubio, la precisión del robot permite que “el tejido maligno se pueda eliminar de una forma rápida, eficaz y mínimamente invasiva, sin complicaciones, lo que conlleva unos resultados oncológicos excelentes y una recuperación funcional magnífica y casi inmediata”. “Estos excelentes resultados se ven especialmente bien reflejados en el tratamiento quirúrgico del cáncer de próstata y el cáncer renal”, sostiene. Tratamiento individualizado Otro de los beneficios de la cirugía robótica para el cáncer de próstata es que permite plantear un tratamiento individualizado, que redunda entre otras cosas en una recuperación más rápida con menos tiempo de hospitalización. “La prostatectomía radical robótica con preservación del espacio de Retzius, es una técnica de alta complejidad que hacemos regularmente en nuestro equipo. Con ella hemos logrado que un porcentaje muy alto de pacientes que alcancen una continencia urinaria completa e inmediata y preserven la potencia sexual “. Además, esta cirugía permite tener unos resultados óptimos disminuyendo de forma importante los posibles efectos secundarios de la cirugía como la incontinencia y la potencia sexual en pacientes con cáncer de próstata. El robot Da Vinci, también para otras patologías Además del uso de la cirugía robótica para cáncer de próstata, el Da Vinci se utiliza también en la urología, y en otras especialidades como cirugía general, ginecológica, en cirugía de cuello, y en otorrinolaringología. De hecho, las patologías más frecuentes son, según el Dr. Rubio, el “cáncer de próstata, la hiperplasia de próstata y los tumores renales”. Sin embargo, matiza que, en urología, la cirugía robótica “abarca desde el cáncer de vejiga, litiasis, estenosis de uréter o prolapso genital, pasando por la cirugía de suprarrenal, hasta la reparación o liberación del nervio pudendo”. Del mismo modo, los tumores de riñón se benefician, también, de la cirugía robótica al igual que las estenosis de la pelvis renal. “El robot permite mayor precisión en la cirugía parcial permitiendo resecar el tumor y preservar el riñón en muchos casos, afirma. Fuera del ámbito urológico la robótica es utilizada en cirugía digestiva y ginecológica, en cirugía del cuello, etc.”, destaca el profesional. Fuente: Vithas |