El Hospital Vithas Valencia Consuelo ha incorporado, de la mano del traumatólogo Alberto Revert, el protocolo de recuperación rápida (fast track), que supone “un cambio integral en el protocolo quirúrgico” en las prótesis de rodilla y cadera y que implica “numerosos beneficios” para los pacientes como poder caminar desde la misma tarde de la intervención, tal y como ha explicado el profesional.

El doctor Revert ha explicado que este procedimiento supone aplicar, por una parte, “cambios en la técnica prequirúrgica de preparación al paciente antes de la cirugía”. También implica cambios “durante la cirugía, en las curas y en la rehabilitación postquirúrgica”. Un protocolo que ha permitido “mejorar de manera sobresaliente” los resultados obtenidos desde el inicio de su implantación.

El equipo del doctor Revert ha instaurado este protocolo en las cirugías de prótesis de rodilla y cadera desde el año 2018 “con un resultado excelente” y se aplica ahora en el Hospital Vithas Valencia Consuelo.

Entre las ventajas para los pacientes, el doctor Alberto Revert ha destacado que “se reduce el ingreso hospitalario a 48 horas de media, cuando el modo de intervención clásico rondaba en torno a los cinco días”. También supone “una mejoría notable del dolor postoperatorio” que hace que el paciente “pueda caminar desde la misma tarde de la intervención quirúrgica”.

Además, el profesional del Hospital Vithas Valencia Consuelo ha resaltado que conlleva una mejoría “notable de la movilidad, por lo que, con una menor necesidad de fisioterapia, los pacientes alcanzan una movilidad completa de rodilla y cadera de manera precoz”. Por último, el doctor Revert ha destacado que “en nuestra serie, ningún paciente ha requerido ningún tipo de transfusión sanguínea”.

La aplicación de este procedimiento de recuperación rápida requiere, tal y como ha indicado el profesional, “de una coordinación perfecta entre cirujano, enfermería de planta, enfermería quirúrgica, anestesistas y el equipo de fisioterapia o rehabilitación” para poder obtener “unos resultados óptimos”.

Esta coordinación entre todos los profesionales que atienden al paciente de prótesis de cadera y rodilla “abarca desde el preoperatorio, con la elección de los tratamientos previos a la intervención, así como los antibióticos para reducir el riesgo de infección o la medicación para reducir el riesgo de sangrado intra y postoperatorio”. También dentro del quirófano “utilizando nuevas técnicas que provocan un menor sangrado y un mayor control del dolor postoperatorio”, así como “técnicas anestésicas sobre la rodilla o cadera intervenida que reducen el dolor en las primeras 24-48 h y permiten una rehabilitación precoz”.

Por último, el doctor Revert ha indicado que “cualquier paciente que no tenga patología cardiovascular grave puede ser buen candidato a una prótesis de cadera o rodilla mediante este novedoso protocolo”.

Fuente: Vithas