Dexametasona nasal (R01AD03)

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Mecanismo de acción
Dexametasona nasal

La dexametasona es un glucocorticoide sintético que atraviesa las membranas celulares y se une a receptores citoplasmáticos específicos. Este complejo se traslada al núcleo celular, donde modula la transcripción de genes antiinflamatorios. Inhibe la acumulación de células inflamatorias (como leucocitos y macrófagos), la fagocitosis, la liberación de enzimas lisosomales y la producción de mediadores químicos de la inflamación. Se absorbe rápidamente por vía oral, se metaboliza en el hígado de forma lenta y se elimina principalmente por vía renal en forma de metabolitos inactivos.

Indicaciones terapéuticas y Posología
Dexametasona nasal

Modo de administración
Dexametasona nasal

Vía Inhalatoria

Contraindicaciones
Dexametasona nasal

Está contraindicado en pacientes que son hipersensibles a los corticoesteroides.

Advertencias y precauciones
Dexametasona nasal

La dexametasona debe utilizarse exclusivamente por vía inhalatoria mediante nebulizaciones, únicamente en situaciones agudas como crisis asmáticas, rinitis o bronquitis, y siempre bajo indicación médica; la absorción de las dosis inhaladas de dexametasona es del 30 al 50% según la U.S.P.; las nebulizaciones con dexametasona deben emplearse solo como tratamiento de apoyo en episodios agudos y no como terapia de mantenimiento; la dexametasona no debe utilizarse de forma crónica por esta vía debido al riesgo de efectos sistémicos y supresión del eje hipotalámico-hipofisario-adrenal.

Insuficiencia hepática
Dexametasona nasal

En pacientes con insuficiencia hepática, la eliminación de dexametasona puede estar disminuida debido a una reducción en el metabolismo hepático, lo que podría aumentar la exposición sistémica al fármaco. Por tanto, puede ser necesario un ajuste de dosis y una vigilancia clínica estricta para prevenir efectos adversos como inmunosupresión excesiva, hiperglucemia o trastornos psiquiátricos. Se recomienda utilizar la dosis mínima eficaz durante el menor tiempo posible.

Insuficiencia renal
Dexametasona nasal

En pacientes con insuficiencia renal, no suele ser necesario un ajuste de dosis de dexametasona, ya que su eliminación se realiza principalmente por metabolismo hepático. Sin embargo, se recomienda un control clínico estrecho, ya que la retención de sodio y líquidos, así como la posible hipertensión, pueden agravarse en estos pacientes. Además, debe considerarse el riesgo de alteraciones en el equilibrio hidroelectrolítico, especialmente con tratamientos prolongados.

Interacciones
Dexametasona nasal

La administración concomitante de dexametasona con dosis elevadas de paracetamol puede aumentar el riesgo de hepatotoxicidad; el uso conjunto de dexametasona con antiinflamatorios no esteroideos (AINEs) incrementa el riesgo de úlcera o hemorragia gastrointestinal; los antiácidos pueden reducir la absorción de dexametasona; el uso simultáneo de dexametasona con glucósidos digitálicos aumenta la posibilidad de arritmias; no se recomienda la administración de vacunas con virus vivos durante el tratamiento con dexametasona, ya que puede potenciarse la replicación del virus vacunal.

Embarazo
Dexametasona nasal

El uso de dexametasona durante el embarazo debe ser cuidadosamente evaluado, ya que puede atravesar la placenta y afectar al feto. Está indicado solo cuando el beneficio para la madre supera el posible riesgo fetal. No se han demostrado efectos teratogénicos claros, pero el uso prolongado o en dosis altas puede afectar el desarrollo fetal y la función endocrina. En cuanto a la fertilidad, no se ha observado un impacto significativo con el uso adecuado y controlado de dexametasona.

Lactancia
Dexametasona nasal

La dexametasona se excreta en la leche materna en pequeñas cantidades, por lo que su uso durante la lactancia debe ser valorado con precaución. Se recomienda evitar dosis altas o tratamientos prolongados para minimizar el riesgo de efectos adversos en el lactante. En casos donde el tratamiento sea indispensable, se debe monitorizar al bebé para detectar posibles signos de supresión del eje hormonal o alteraciones inmunológicas.

Reacciones adversas
Dexametasona nasal

Euforia, insomnio, cefalea; náuseas, fatiga; hipertensión, hipoglucemia; fiebre, mareo, desmayo; urticaria, sensación de falta de aire, opresión en el pecho.

Monografías Principio Activo: 29/05/2025

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