Una media de cinco selfies previos antes de la gran foto final se almacenan en los smartphones de casi la mitad de los jóvenes usuarios de redes sociales. Y más de un 70% de ellos combinan esa foto con filtros para mejorar el aspecto final y verse más atractivos. Cuando se trata de interactuar en redes, la preocupación mayoritaria de los jóvenes españoles es lucir un aspecto mejor del que realmente tienen en sus foros de comunicación virtuales más usados. Así lo acredita un estudio liderado por Zoviduo sobre la conducta de la población española de entre 18 y 25 años¹, realizado entre febrero y marzo de 2020.

Las imágenes compartidas por los usuarios en redes sociales están estableciendo unos estándares irreales para la población joven y están afectando de forma negativa a su confianza. De hecho, el 69% de los que participaron en el estudio admiten haber sentido cierta ansiedad al comparar su piel con las pieles impecables que ven en sus redes sociales.¹

Raquel Sánchez de Benito, experta en coaching, sostiene que “el aspecto físico es uno de los elementos clave que afectan a la autoestima de nuestros jóvenes. Esa comparación constante con los iconos de belleza que muestran las redes sociales que tanto consumen, provocan un alto grado de malestar que influye directamente en sus relaciones personales”.

La experta no es ajena a la realidad que el coronavirus ha construido y los cambios que puede conllevar. “Dada la situación actual, han pasado de tener contacto físico con sus amigos y conocidos a tener un contacto exclusivamente virtual. Esta ‘nueva normalidad’, aunque puede favorecer a que muchos de ellos se sientan más protegidos detrás de sus dispositivos móviles, no resuelve el problema de base, que es la falta de autoconfianza que les produce esa búsqueda de la ‘perfección’ en su aspecto”.

El estudio, realizado a través de la empresa británica de investigación de mercados One Poll, se centra también en las rutinas y costumbres de los jóvenes españoles y revela que estos invierten 59 minutos al día preocupándose por cuestiones relacionadas con su físico, como su piel y su pelo, lo que se traduce en un total de más de dos semanas al año¹

Una de las inseguridades más comunes entre los jóvenes de 18 a 25 años es el no poder presumir de una piel “bonita”. Un tercio de los participantes afirma tener algún tipo de problema en su piel durante gran parte del mes, lo cual les provoca ansiedad y angustia. Para combatirlo, casi la mitad recurren al maquillaje para ocultar las manchas, marcas y herpes labiales; y un 44% afirma haber llegado a evitar incluso participar en eventos sociales.

Ante esta preocupación colectiva, el estudio muestra que las próximas generaciones necesitan recibir una mejor educación en lo que se refiere al cuidado de la piel, ya que solo una cuarta parte sabe cómo actuar para prevenir afecciones tan comunes como el herpes labial. De hecho, un 35% cree, erróneamente, que la aparición del herpes labial es debido a una reacción alérgica.

En un intento por deshacerse de las manchas y los herpes, aproximadamente un tercio de los participantes confiesa haber recurrido a medidas desesperadas y remedios populares, como aplicar pasta de dientes en la zona afectada. El 5% incluso afirma haber llegado a usar salsa de tomate o vinagre, en lugar de un producto clínicamente probado1

Beatriz González, Directora de Marketing en GSK Consumer Healthcare España, explica que “La situación que viven los jóvenes por la presión de lucir un aspecto físico impulsado por estándares ajenos a la realidad es preocupante, ya que en muchos casos estos estándares son irreales e imposibles de alcanzar. Esta investigación ha demostrado que la preocupación por el físico es un tema clave en la estabilidad psicológica de los jóvenes; por lo que, cuando surgen manchas u otras afecciones similares, pueden llegar a perder tanto la seguridad en sí mismos hasta el punto de no querer socializarse con normalidad. Además, está por ver qué ha cambiado en este tiempo en el que nuestras relaciones sociales se han reducido a lo virtual y si la nueva normalidad nos llevará a apreciar más la imagen real y no los filtros”.

Beatriz González también manifestó que “Por esta razón, desde GSK CH tenemos la responsabilidad de poner toda nuestra innovación científica y conocimiento al servicio de todas las personas para acercarles los mejores productos para cuidar su salud y bienestar y toda la información disponible para que puedan saber más de su cuerpo, en este caso su piel, sean plenamente conscientes y puedan construir una autoestima fuerte basada en la confianza y seguridad en sí mismos”.

Siguiendo esta premisa, desde la página web www.zovi.es, GSK ofrece detallada información sobre las popularmente conocidas como “calenturas”, los primeros síntomas para identificarlas, las mejores opciones para combatirlas o los posibles factores desencadenantes que las provocan.

Encuesta realizada por One Poll Research, en la que participaron 2.000 personas de entre 18 y 25 años, entre febrero y marzo de 2020.

Acerca de Zoviduo

Zoviduo es un medicamento indicado para combatir el herpes labial, deteniendo el virus y reduciendo la inflamación. Es una crema que consigue reducir significativamente el proceso de curación del herpes labial cuando se usa pronto, en los primeros síntomas. Incluso si la calentura se desarrolla hacia una ampolla, Zoviduo acortará el proceso de curación en aproximadamente de medio a un día en comparación con la crema sin los principios activos. Además, gracias a su fórmula -que combina un antiinflamatorio (hidrocortisona) y un agente antiviral (aciclovir)- consigue reducir el impacto global del herpes labial* y puede frenar la progresión a ampolla.

Zoviduo 50mg/g y 10mg/g crema. Para el tratamiento de los primeros signos y síntomas del herpes labial en adultos y adolescentes de 12 años y mayores. GlaxoSmithKline Consumer Healthcare. Lea las instrucciones de este medicamento y consulte al farmacéutico.

*Comparado con placebo. Medido como el área de la lesión acumulativa a lo largo del tiempo.

Fuente: Weber Shandwick