Hoy, 25 de septiembre, Día Internacional de la Ataxia, los expertos de neurorrehabilitación de Vithas, recuerdan que una de las principales causas de ataxia secundaria es el abuso del consumo de alcohol.

“Más que una enfermedad, la ataxia es un síntoma motor que puede aparecer en múltiples enfermedades neurológicas. Algunos casos de ataxia tienen un patrón de aparición familiar y de hecho suelen estar ligadas a alguna alteración genética hereditaria. Muchos de estos casos suelen ser procesos degenerativos que provocan un empeoramiento de la movilidad del paciente a lo largo de su vida” afirma el doctor Enrique Noé, neurólogo y director de investigación de Vithas NeuroRHB, servicio de neurorrehabilitación del Grupo Vithas.

Según su experiencia, la causa más frecuente de ataxia suele ser adquirida o secundaria, es decir, que esta provocada por una alteración como una infección, tumor, hemorragia, entre otros. Y, dentro de esta segunda categoría, la más frecuente es la ataxia producida por el alcohol.

“Desde que comenzó la pandemia”, explica el reconocido neurólogo de Vithas, “diferentes medios se han hecho eco del aumento de venta de alcohol y cómo su consumo ha crecido de forma exponencial en pocos meses. En nuestro caso, como profesionales especializados en rehabilitación neurológica, si algo tenemos claro por nuestra experiencia, es que el consumo prolongado de bebidas alcohólicas causa efectos devastadores en el cerebro, tanto a nivel cognitivo (pérdida de memoria, problemas de atención, enlentecimiento del pensamiento),  emocional  (impulsividad, irritabilidad, pérdida de iniciativa y motivación),  como físico (debilidad o disminución en la capacidad de coordinación de los movimientos o ataxia)”.

Según señalan los expertos en rehabilitación neurológica de Vithas, la ataxia no suele provocar debilidad o pérdida de fuerza, sino que las personas afectadas por este problema suelen ser capaces de realizar casi cualquier movimiento normal, pero de forma brusca, imprecisa y poco coordinada. Lo que puede hacer que, durante mucho tiempo, la persona que ingiere alcohol con frecuencia no detecte que padece este trastorno y lo achaque a una mayor torpeza temporal motora.

Siguiendo esta línea, el doctor Noé afirma que los pacientes atendidos en Vithas NeuroRHB con ataxia, ya sea a causa de un ictus o por ingesta de alcohol, suelen quejarse de pérdida de destreza, torpeza, temblor y dificultades de manipulación, inestabilidad y desequilibrio, tanto estando de pie como durante la marcha, como síntomas más frecuentes.  Además, suelen manifestar dificultades para alcanzar, manipular objetos o escribir, si los músculos afectados son los del miembro superior, e incluso presentar problemas de fijación visual o trastornos de la deglución o el habla.

Sistema de valoración propio y plan de tratamiento intensivo de la ataxia

Para su correcto diagnóstico, Vithas NeuroRHB ha desarrollado un sistema de valoración con el que el paciente podrá conocer si sus alteraciones están relacionadas con este trastorno de manera confidencial, tanto de forma presencial en sus centros como de forma online, sin necesidad de desplazarse, a través de su plataforma tele.neurorhb.com.

Una vez realizada esta aproximación o si el paciente ya cuenta con el diagnóstico, podrá comenzar en los centros de Vithas NeuroRHB su programa intensivo de ataxia que consta de diferentes exploraciones complementarias para conocer de forma detallada el patrón clínico del paciente y de un abordaje multidisciplinar de cuatro semanas dirigido a mejorar problemas de coordinación, equilibrio y destreza manual. Programa que cuenta con la posibilidad de combinarlo con intervenciones intensivas de tratamiento de dificultades de deglución o articulación del lenguaje, también muy frecuentes en esta tipología de paciente.

Vithas NeuroRHB cuenta con cinco centros en toda España -Vithas Vigo, Vithas Sevilla Aljarafe; Vithas Valencia Consuelo; Vithas Aguas Vivas; y Vithas Vinalopó - y se encarga del cuidado y tratamiento de pacientes que han sufrido daño cerebral u otras enfermedades neurológicas.

Fuente: Vithas