Borrar arrugas y cicatrices, estilizar contornos, rellenar depresiones o eliminar manchas… Si bien es cierto que el tiempo pasa para todo el mundo, también lo es que cada vez existen más herramientas para minimizar su impacto. La tecnología y los conocimientos en dermatología están volcados en luchar contra el desgaste del día a día y en recuperar un rostro armónico y saludable. Así se constatará estos días en la XXXI Reunión del Grupo de Dermatología Estética y Terapéutica (GEDET) que tendrá lugar en el Palacio de Exposiciones y Congresos de León del 14 al 16 de noviembre.  

“Nuestra especialidad es muy tecnológica, prueba de ello son las múltiples aplicaciones de los diferentes láseres cutáneos. Pero vamos más allá, esta reunión ofrece la oportunidad para realizar un análisis del área terapéutica y estética de la dermatología, con especial énfasis en evidencias científicas contrastadas para avanzar en técnicas infiltrativas, rellenos, suturas de tensado, formulaciones magistrales o terapias para el manejo de carcinomas epidermoides, úlceras digitales, piel sensible o reacciones a las tintas de tatuajes”, señala el Dr. Agustín Viera, coordinador del GEDET, un grupo de trabajo de la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV).

En este congreso se hablará del uso de la grasa autóloga para armonización facial y tratamiento de cicatrices. “Estamos comprobando que, para ciertos tipos de cicatrices, como las generadas por patologías como el acné o el lupus, que dejan depresiones en la piel, la inyección de grasa extraída del abdomen o las caderas, centrifugada y tratada, da volumen y corrige este tipo de cicatrices. Además, tiene la ventaja de que, en pacientes con enfermedades autoinmunes con un mayor riesgo de rechazo a sustancias exógenas, funciona muy bien”, explica el Dr. Manuel Ángel Rodríguez, coordinador de esta reunión y uno de los dermatólogos que impartirán un curso precongreso en León sobre esta técnica que, según señala el Dr. Rodríguez, es un procedimiento rápido ya que todos los pasos se pueden hacer en la misma consulta. Además, tiene la ventaja de que permite su utilización en pacientes con enfermedades autoinmunes, en los que materiales exógenos no estarían indicados por su mayor riesgo de rechazo a sustancias exógenas.

Precisamente, se hablará durante el congreso de una forma novedosa de aplicar esta grasa en micro cantidades. “Se manipula para deshacer la grasa y hacer un licuado en el que, sobre todo, hay células madre y factores mediadores que promueven la formación de fibroblastos y la angiogénesis. A esto se suma una nueva forma de inyección, a través de micro agujas que inyectan estas células en la dermis. Todo esto ayuda a tratar las arrugas superficiales y las cicatrices”, enumera el Dr. Jorge Soto, dermatólogo y director de la Fundación Piel Sana de la AEDV.     

Las innovaciones en dermatología estética pasan también por las mejoras de los hilos tensores y las técnicas de relleno como el lifting líquido, que consigue resultados más homogéneos que los rellenos clásicos. Tal y como explica el Dr. Íñigo de Felipe y Gárate, uno de los dermatólogos ponentes de este congreso, en relación con el lifting líquido, “hemos mejorado las técnicas para inyectar los materiales de relleno, poniéndolos en una disolución de suero y anestesia e introduciéndolos una cánula en planos lo que mejora notablemente su depósito y evita la formación de bultos. De forma similar, se han logrado avances en los hilos, ya que una nueva tecnología coreana permite su moldeado con ultrasonidos, lo que supone que su efecto dure hasta cuatro veces más. Disponen también de diferentes formas de anclaje, como múltiples conos o puntas de flecha que ayudan a traccionar la piel. Además, también se empiezan a utilizar agujas romas, que reducen el riesgo de hematomas

La Dra. Elia Roo incide en otras mejoras que están por llegar en las sustancias de relleno y que se presentarán en esta reunión. “Actualmente, están en investigación estudios con nuevos materiales de relleno para infiltración como la tropoelastina, una proteína que estimula la formación de las fibras elásticas y que servirá como tratamiento para cicatrices provocadas por el acné y estrías”.

Esta especialista también presentará los avances en investigación con toxina botulínica. Actualmente, la que se utiliza es la toxina botulínica tipo A, cuyo efecto dura entre cuatro y seis meses. Sin embargo, están en marchas varios estudios con la toxina botulínica tipo E, que tiene como principal ventaja su acción inmediata: sus efectos pueden verse a las 24 horas. “Otra característica es que su duración es más corta, lo que puede ser negativo, pero también positivo, ya que, si alguien no está seguro de aplicarse la toxina clásica para eliminar arrugas, puede probar con esta porque su efecto desaparecerá en dos o cuatro semanas”, señala esta dermatóloga que adelanta los datos de investigación con otra sustancia, la daxibotulina, que logra mantener su efecto más de seis meses. “Seguramente, el próximo año sea aprobada en Estados Unidos, ya que los estudios de investigación con esta sustancia están más avanzados”.   

La estética no será la única área dermatológica que se desarrollará en este congreso ya que, como explica el coordinador del GEDET, “se intenta reflejar la riqueza y amplitud de nuestra especialidad en las áreas de conocimiento de nuestro grupo de trabajo. La parte terapéutica se plantea desde distintas visiones, desde casos clínicos, la experiencia de expertos, algoritmos o guías de tratamiento basadas en la evidencia científica. Hay que tener en cuenta que cada año los dermatólogos recibimos unas siete millones de consultas. Esta es una especialidad que abarca desde el cáncer, pasando por las infecciones de transmisión sexual y la estética. Porque en nuestra sociedad no sólo es importante estar sano sino verse sano, por dentro y por fuera”, concluye el Dr. Agustín Viera.

Fuente: Edelman