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El cloro afecta negativamente a tus ojos

VADEMECUM - 24/08/2017  PUBLICACIONES

Una higiene ocular correcta nos ayudará a calmar posibles molestias si somos constantes

Es un clásico del verano. Darse un chapuzón y salir de la piscina con irritación y escozor en los ojos. Injustamente tendemos a echar la culpa al cloro de esta situación, cuando el desinfectante del agua únicamente no es, al menos, el único responsable directo (1). También tienen culpa las cloraminas (2), compuestos que se forman por reacción química entre el cloro y contaminantes originados en los propios bañistas (entre otros, sudor, saliva, piel muerta, cremas, lacas, perfumes).

De lo que no cabe duda es que todo ello puede afectar a nuestros ojos, una de las partes más vulnerables de nuestro cuerpo. Prevenir siempre será la primera y mejor opción. Para ello es fundamental recordar las reglas básicas: ducharse antes de entrar en la piscina, disponer de servicios cerca de la misma, utilizar un gorro de baño y gafas si se practica la inmersión.

La prevención no siempre es suficiente. Lo normal es que tras el primer baño, y en función de la sensibilidad de cada uno, los primeros síntomas (irritación y escozor ocular, aunque también puede producirse irritación en la piel o en las vías respiratorias) aparezcan a los 30 minutos del primer baño. No sólo por ello el cloro y la cloramina son los principales enemigos de los ojos durante los meses de verano. También pueden generar consecuencias a más largo plazo si irritan las mucosas oculares.

En la mayoría de los casos, el baño de la piscina genera escozor. Cuando sucede, viene acompañado de enrojecimiento y de picor (3). Pero tratarlo es más fácil de lo que puede parecer. Una higiene ocular correcta nos ayudará a calmar posibles molestias si somos constantes. Dentro de las posibilidades de que disponemos, hay un producto indicado para el lavado ocular.

Euphralia es una solución oftálmica utilizada como limpiador ocular en adultos y niños a partir de un año, en caso de irritación, molestias oculares o sequedad ocular ligera de origen diverso: esfuerzo ocular prolongado, agua de mar o piscina, fatiga ocular, humo, polvo o aire acondicionado.

Esta solución, aplicable en cada ojo de 2 a 6 veces al día, viene presentada en forma de cómodas monodosis, lo que permite llevarla consigo y poder usarla en cualquier momento. Además, no requiere condiciones especiales de conservación. Si se está utilizando un medicamento en forma de colirio, debe distanciarse la administración de Euphralia al menos 15 minutos.



(1) Resúmenes de Salud Pública – Cloro (Chlorine). Agencia para Sustancias Tóxicas y Registro de enfermedades. [Online][Consultado 04-08-2017] https://www.atsdr.cdc.gov/es/phs/es_phs172.html  

 

(2) Reducción de enfermedades en los parques acuáticos cubiertos. Agencia para Sustancias Tóxicas y Registro de enfermedades. [Online][Consultado 04-08-2017]

https://www.cdc.gov/spanish/niosh/docs/wp-solutions/2010-138_sp/

 

(3) Noticia: “Piscinas: el efecto del cloro sobre los ojos” [Online][Consultado 04-08-2017] http://www.efesalud.com/piscinas-el-efecto-del-cloro-sobre-los-ojos/

 

Fuente: Laboratorio Boiron 

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